lunes, 25 de octubre de 2010

Sobre la generosidad, la colorimetría y otras cosas, por Eusebio Bernabeu

1.- De la Generosidad
Tener a Jesús Zoido Chamorro, como amigo, compañero y discípulo me dan la oportunidad de poder transmitir ahora las sensaciones y sentimientos que su recuerdo y presencia me suscitan. Para mí Jesús fue un amigo y compañero generoso en el sentido pleno de lo que la generosidad es. Es decir, anteponer siempre la amistad a la utilidad y el interés, con largueza, liberalidad y la sencilla grandeza de inclinación natural por ello.

La palabra “generosidad” incluye el término “gen” que también lo encontramos en las palabras “género”, “generación” y “generativo”. Del latín genus y del griego genos, se refiere al hecho de pertenecer a una clase, a un grupo. La generosidad es una dar que viene de saberse parte de ese vínculo íntimo que la amistad y la proximidad suscita. La generosidad actúa desde el convencimiento –no desde el sentimiento- de que a todos a los que el generoso se entrega, presta con su presencia, con su ayuda son “parientes” y pertenecen a su familia, a su “gen”, a su clase. Para Jesús esa clase o grupo amplio era extenso, se desparramaba en sentido abierto, creando por doquier amigos y conocidos, que le correspondían, que le corresponden; pues, la generosidad crea la propia unión de los que creen y usan de ella.


Después, lo que queda, es el bien intangible transmitido que la figura de la nobleza enaltece en el recuerdo al excelente amigo que te la regaló en extremo, con la singularidad natural de la sencillez prestada.

No resulta sencillo de analizar los orígenes y las causas de la generosidad: nobleza de sangre, sencillez de espíritu, sensibilidad de alma,… pero lo que sí me parece claro discernir es que a la generosidad se puede llegar por el dolor sentido y superado. Pues el dolor es como una permanente oración que puede forjar y templar el ánimo para una especie de compasión universal, de pretender remediar o paliar la necesidad ajena en un sentido sin fronteras, para aceptar y compartir a cualquier persona, sin importar cuál ha sido su trayectoria, o su condición. En ese sentido creo ver en Jesús un ejemplo a seguir, una disciplina que incorporar; porque no creo que esa generosidad de la que hablo salga de manera espontánea, sino que se gana con el perdón, la humildad y la entrega. ¡Imponente legado y continua tarea nos dejas!, Jesús. Gracias.

2.- De la Colorimetría


La Colorimetría es una parcela del conocimiento abstracto que pretende dar respuesta cuantitativa al comportamiento sensorial de la percepción visual del universo de colores en que como humanos nos envuelve.


Muchos e importantes son los científicos intelectuales, que se ha sentido llamados a esclarecer y crear esta ciencia y técnica del color: de Aristóteles a Goethe y Le Parc en lo conceptual; Newton, Delacroix, Blay, en la experimentación natural; Lambert, Runge, Munsell, Ostwald, Hickethier, MacAdam, Wyszecki en las normativas de tecnología cromática, y Helmholtz, Schrödinger, Hering, Judd en lo estructural, son nombres bien conocidos y establecidos a los que Jesús Zoido Chamorro convino en asociarse. Y digo esto con el convencimiento cierto de que la aportación de Jesús a la Colorimetría es muy relevante para situarla en la línea de los grandes científicos que la han venido estableciendo. Como director de su Tesis Doctoral puedo dar fe de como conforme sus resultados tomaban cuerpo, él era consciente de la envergadura de sus logros y de la dificultad de penetración que en el “mercado” científico podían presentar, cuanto que conturbaban mejorando –mejor dicho superando- las bases de colorimetría diferencial establecidas hasta el momento. Afortunadamente para nosotros Jesús y yo no estuvimos solos: Fernando Carreño, riguroso discípulo mío, compañero y amigo entrañable de Jesús nos acompañó. La aportación de Fernando fue importante, pues le sirvió a Jesús de continuo apoyo científico y le fortaleció en la perseverancia para culminar su Memoria Doctoral. Recuerdo ahora las dificultades que Jesús me llevó atender, cómo juntos fuimos buscando apoyo de colegas amigos de la Facultad de Matemáticas donde nuestros conocimientos no alcanzaban. A pesar de mis esfuerzos por comprimir su Memoria Doctoral la labor que realizó Jesús fue extensiva y su Tesis Doctoral fue una Memoria auto-consistente, de gran valor científico y exhaustivamente probatoria de su aportación original.


La colaboración de Jesús con Fernando Carreño encontró un fruto de continuidad en la codirección de la Tesis Doctoral de José Miguel Ezquerro. Jose Miguel dio un paso estamental a los resultados de las ideas iniciales planteadas por Jesús en su Tesis, al analizar la influencia de las funciones de igualación de color en la percepción colorimétrica absoluta y relativa de estímulos de color. De esta colaboración resultaron un buen número de publicaciones en las que obviamente Jesús contribuyó fuertemente y con la generosidad siempre natural en él.


La colorimetría diferencial tiene como objeto construir una métrica y una geometría que dé cuenta de la capacidad discriminativa de diferenciar dos colores. Ello lleva consigo una trascendente repercusión tecnológica, a la que tampoco éramos ni somos ajenos. De ahí nuestro ahínco y preocupación por validar y contrastar la validez de nuestra apuesta. Con ocasión de viajes al extranjero y también en España fui exponiendo a colegas especialistas de confianza lo que Jesús estaba construyendo. Es de destacar el apoyo, comprensión e interés que Manuel Melgosa y Enrique Hita le depararon. Todos me mostraron una acogida favorable, una confianza propicia a los resultados y metodología, pero me añadían a renglón seguido que estos trabajos tambaleaban las bases mismas de la colorimetría y que, aunque se palpaba ya en el ambiente científico deseos de revisión, el cambio y las nuevas ideas de Jesús y de otros científicos en igual línea tardaría más de 15 ó 20 años en calar.


Es bien conocido que o el inicial trabajo experimental sobre las diferencias cromáticas representadas en porciones pequeñas del espacio CIE 1931 y del ajuste empírico llevado a cabo MacAdam en 1942 plasmado en las llamadas “elipses de MacAdam” (1), que posteriormente en 1949 y 1951 fueron extendidos a todo el espacio cromático en los conocidos “elipsoides de Brown-MacAdam” (2), han marcado el camino hacia los pretendidos espacios uniformes de color como: CIELAB, CIELUV y SVF (3). Modelos de apariencia cromática que se han venido aplicando en toda la repercusión tecnológica de la colorimetría: iluminación, escáneres, fotografía, artes gráficas, colorantes industriales, pinturas, alimentación, TV, biomedicina, analítica, genómica, entre muchas.


Pues bien, la distancia estadística generalizada aplicada al espacio cromático introducida por Jesús Zoido permite la medida cuantitativa de la variabilidad entre observadores o entre distribuciones espectrales metaméricas. Sus resultados evidencian la deformación de las llamadas “elipses de MacAdam”, y que la útil abstración aproximada de las elipses no es suficientemente válida, ni consistente (4, 5).


Menos conocido es una tarea tecnológica de carácter aplicada realizada por Jesús en relación a la Colorimetría Industrial de ámbito muy cualificado. Se trata de la metodología de calibración colorimétrica de cámaras CMOS basada en la técnica del símplex y tomando la variabilidad entre las matrices características de sistemas de representación optimizados (6). Trabajo inédito de Jesús que pensé inicialmente compilar y publicar para esta ocasión, pero el espacio limitado en el texto y, sobretodo, el poco tiempo disponible no ha hecho posible esta labor ahora. Tarea que queda pendiente en su honor a su Memoria.


3.- Otras cosas


Al término de su Tesis Doctoral sucedieron muchas cosas que me llevaron a la conveniencia decidida, contrastada con Fernando y otros buenos amigos de nuestro grupo (Daniel, Jose, Javier,…), de que Jesús Zoido hiciera una estancia postdoctoral lejos de España. Tuve la oportunidad de enviarle a la Universidad de Harvard, bajo el amparo de Glauber, entonces ya emérito, y allí Jesús tuvo la ocasión de ponerse en orden sus ideas, preparar parte de las publicaciones que aún quedaban pendiente de su Tesis e iniciar otras inclusiones en otros ámbitos de la Física, como extensión natural del formalismo de la métrica colorimétrica por él establecido. En esta etapa posterior a su regreso de USA Luis Lorenzo Sánchez Soto le acompañó y animó en su atención, siguiéndole también por mí parte . ¡Lástima que los avatares del día-día, las clases, y amplio devenir nos hayan impedido conocer hechas gran parte de estas posibilidades por él desbrozadas! Pero ahí están sembradas por él y esperando un día a alguien o mejor alguno de nosotros, tal vez…


Pero antes de todas estas cosas y aún de su tesis, Jesús ya había realizado muchas otras cosas entre nosotros. Inicialmente, junto con nuestro siempre recordado Jose Luis Escudero y de nuestro común buen amigo Hector Guerrero, que le confería entusiasmo, se inició en la caracterización de LEDs, Jesús le apoyó bien dispuesto sen la caracterización y ensayos de fibra óptica plástica (Optipol) (7), después en su implementación tecnológica en señalización, que luego retomaríamos ya él Doctor en la mejora de sistemas de paneles de mensaje variable y en otras aventuras puntuales de iluminación y colorimetría, junto con Daniel Vázquez, Antonio Álvarez Fernández-Balbuena y otros. A Jesús recurrimos al alimón Daniel y yo con frecuencia, buscando una necesaria continuidad en su labor, y una colaboración fiable y rigurosa. Y de buen seguro que ahora estaríamos embarcándonos juntos en otra nueva aventura, si es que nos se nos hubiera ido. Realmente, Jesús, notamos y notaremos tu ausencia.


Pues bien, continuemos. Esta es nuestra ofrenda a tu memoria.


REFERENCIAS


1.- D.L. MacAdam: "Visual sensitivities to color differences in daylight", J. Opt. Soc. Am., 32, 247, (1942).

D.L. MacAdam: Color Measurement. Springer-Verlag. Berlin Heidelberg, 1981 y 1985.


2.- W.R.J. Brown y D.L.MacAdam: "Visual sensitivities to combined chromaticity and luminance diferences", J. Opt. Soc. Am., 39, 808, (1949).


W.R.J. Brown: "The influence of luminance level on visual sensitivity to color differences", J. Opt. Soc. Am., 41, 684 (1951).


3.- Por citar bibliografía general reciente: P. Capilla, J.M. Artigas y J. Pujol: Fundamentos de Colorimetría. Universitat de Valencia. Valencia, 2002. Cap. 4 (P. Capilla y M.J. Luque: "Discriminación cromática y diferencias del color").


4.- J.M. .Zoido, F. Carreño and E. Bernabeu: "The characteristic matrix of a color detction system", J. Appl.Opt. 34, 1938 (1999). "On MacAdam´s ellipses", Opt. Pur. Apl. 29, 81 (1996). "Some consideration on MacAdam ellipses", Die Farbe, 43,1(1997).

5.- J.M. Zoido: "Optimization of color-representation systems when comparing differnt observers", Color Res. Appl., 25, 416 (2000).

F. Carreño and J.M. Zoido: "The influence of luminance on color-difference therholds", Color Res., 26, 362 (2001). "The Weber fraction and asymmetries in the luminance thesholds", Color Res. Appl., 27, 330 (2002).

6.- Proyecto Eureka ACOBRICO: para ELDIN de Francia. 2004-05.


7.- H. Guerrero, J.M. Zoido, J.L.Escudero and E. Bernabeu: "Characterization and sensors applications of policarbonate Optical Fibers", Fiber and Integrated Optics, 12, 257 (1993).

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